Textos clásicos
Libro de los azores
- El primero capítulo es de cómo deven melezinar el gavilán que á algún mal en la moliella.
- El segundo capítulo es quando el açor á mal e non saben que mal á.
- El terçero capítulo es del açor que á fastío.
- El .iiiiº. capítulo es quando tiene fincada alguna cossa en la garganta o si á mal en las narizes.
- El .vº. capítulo es si el açor non puede dar voçes.
- El .viº. capítulo es de la malabtia que l’ dizen ons.
- El .vii. capítulo es de la gota filera.
- El .viiiº. capítulo es quando el açor o el gavilán non quiere prender la prissión que suele prender.
- El .ix. capítulo es del açor que bate las alas quando á vexigas.
- El .xº. capítulo es quando el açor es quebrantado por lazeria.
- El .xiº. capítulo es quando el açor á ref.
- El .xii. capítulo es de la piedra.
- El .xiii. capítulo es de los piojos.
- El .xiiii. capítulo es quando el açor á fiebre.
- El .xvº. capítulo es de la gafen.
- El .xvi. capítulo quando el açor á mal en la moliella que gelo non pueden coñoçer.
- El .xvii. capítulo es quando el açor non puede mudar.
- El .xviii. capítulo es quando el açor es maltrecho del sol.
- El .xix. capítulo es de fazer bien manso el açor e que prenda bien aves.
- El .xx. capítulo es de quál tonipra deven tener el açor natural segund los tienpos.
- El .xxi. capítulo es quando duelen al açor los pechos.
- El .xxii. capítulo es de la podagre.
- El .xxiii. capítulo es de la tiña.
- El .xxiiii. capítulo es de lo que deven fazer al açor quan[do] es muy gruesso.
- El .xxv. capítulo es de melezinar el açor que á fumo en los ojos.
- El .xxvi capítulo es de melezinarle quando non retiene la carne.
- El .xxvii capítulo es de engrossar el açor.
- El .xxviii capítulo es de melezinarle del mal de la boca.
- El .xxix. capítulo es de melezinarle quando se caen las péñolas.
- El .xxx. capítulo es de melezinarle quando trieme.
- El .xxxi. capítulo es de la piedra.
- El .xxxii. capítulo es del dolor de la cabeça.
- El .xxxiii. capítulo es del mal que á el açor en la cabeça.
- El .xxxiiii. capítulo es del tornar.
- El .xxxv. capítulo es de fazer volar bien el açor.
- El .xxxvi. capítulo es de melezinar el açor que non puede comer.
- El .xxxvii. capítulo es quando ronca por las narizes.
- El .xxxviii. capítulo es del tremer.
- El .xxxix. capítulo es cómo le an de mudar.
- El .xl. capítulo es que los pelos que arrancaren fazerles que nunca nazcan.
- El .xli. capítulo es de melezinar el açor que á mal en la cabeça.
I
Dezimos assí, que si el gavilán oviere alguna enfermedat en la moliella conviene que tomen palominos pequeños e échengelos delante, e sea el gavilán suelto que l’ prenda él con su mano e que beva la sangre d’él e por el gozo que avrá de la prissión qu’ él prenda será sano.
II
Quando esto acaeçiere al açor, denle carne caliente mojada en miel con limadura de fierro; e al segundo día denle carne caliente mojada en miel con el olio rossado e con la limadura del fierro, e será sano.
III
Si oviere fastío, toma el pássaro que cría en cassa e úntal’ con la miel e mójalo con el vino bueno, e toma el almézaga molida e échala dessusso e dágelo a comer, e tollersel’ á el fastío, e será sano.
IV
Si toviere alguna cossa fincada en la garganta, toma la lexía de los sarmientos bien colada e lava la carne en la lexía e dégela a comer por tres días. Et al terçer día dal’ a comer carne de cabra con manteca e con los polvos del alméztega por tres días. E si oviere mal en las narizes forácalas con una aguja d’aranbre.
V
Quando el açor non puede dar voçes, tájal’ unas landreziellas que son so la lengua e frégal’ la lengua e las landreziellas con la leche del figo manero, e será sano.
VI
Quando oviere una malabtía que l’ dizen ons, toma tegas cochas e muélelas bien e dal’ d’aquellos polvos a comer con la carne caliente e con la sangre del cabrón por tres días. Et toma el çumo del assensio e mételo en el cuero de la pierna de gallina, e después toma el çumo e tórnalo en la pierna e moja la pierna en leche de asna e dágela a comer.
VII
Si oviere gota filera assí gelo coñoçrás, que avrá los ojos turbios e los pies cárdenos. Toma la simiente del yedgo e molerlas as bien e enbuelve la carne caliente bien en aquellos polvos e dágela a comer. E toma la fiel del anguiella e métela en el coraçón de la gallina e dágelo a comer entero. E toma el reibarbo molido e mézclalo con un poco de agua e dágelo a bever si quissiere, e beverlo á e sanará. E toma la çigarra e fazla polvos e dágela a comer en la carne.
VIII
Quando el açor o el gavilán non quiere prender la prissión que suele prender nin quiere ir a ella, sepas que á una enfermedat que es de sangre. E dal’ a comer carne caliente enbuelta en la miel e en la mañana por .v. días e será sano.
IX
Quando el açor va bever agua e bate las alas, sepas que á vexigas en los costados e por esso las bate. E dal’ el primer día a comer la carne caliente con el áloe e otro día dal’ a comer la carne de la cabra con la miel e con la manteca e con la sangre de la paloma. E dal’ esto a comer por .vii. días e será sano.
X
Quando el açor echa el ressollo de sí, sepas que es derramado. E sángralo del cuello e del rostro o de la boca o del dedo postrimero del pie, e dal’ a comer carne de pollo con manteca e será sano.
XI
Si el açor oviere ref, avrá los ojos inchados. E toma tres raízes de rávano e tres granos de habarraz e dos granos de pimienta e tres de clavos, e de gingibre pesso de .vi. dineros, e de xenabe .xxx. granos, e toma unto de puerca que aya parido e buélvelo todo en uno e májalo bien e f[r]íelo todo en una sartén fasta que todas las raízes se defagan, e después cólalo en un paño delgado e condéssalo en una bostia, e dal’ al açor o al gavilán d’ello quanto pudieres tomar con la punta del cuchiello, e dágelo a comer con la carne caliente. E al segundo día dal’ a comer dos tanto; e al terçer día tres tanto. E quanto más le dieres tanto más valdrá e tanto más aína sanará.
XII
Quando el açor á piedra tiene los ojos trienblos e trementes e los pies amariellos además e non puede toller si non con grande lazerio. E si tú coñoçieres que á piedra, toma la gallo cresta e dágelo con la carne caliente; o si no toma el fígado del porçiello con un grano de sal e dágelo a comer. E toma la saín blanca e buélvela con el bálsamo e póngelo en su natura. E pon el açor en tal logar que dé el sol bien, e sin dubda será sano.
XIII
El açor que á piojos es en grande cueta. E toma el marruvio e májalo, e [ó] oviere los piojos úntal’ con aquel çumo, e ponle al sol. E si non sanare, toma el estiércol de los bueys e fazlo polvo e écha[l]o en las péñolas e guárdale los ojos e buélvelo en un paño delgado e blanco e ponlo al sol, e en la vara que l’ pussieres pon ý del marruvio, en toda la vara, e assí irán los piojos en el paño e guarirá el açor.
XIV
Quando el açor lo que come la metad retiene e la otra meatad echa de sí e echa espuma por la boca, sepas que á fiebre. E conviene que tomes las fojas de la salia e fojas de pimient e .vii. granos de pimienta e tres cuchares de miel e de olio rossado una cuchar e un poco de las raeduras del cuerno del çiervo e fazlo bollir en vino, e después ponlo en una bostia; e después ponlo al sol e dal’ d’esta melezina a comer con la carne del buey o del ánsar, el primer día dos tajadas, e al segundo días tres, e al terçero día quatro tajadas.
XV
Quando vieres que á el açor las péñolas mal tajadas, sepas que es gafo. E tomarás la culuebra e coçerla as en el agua, e tomarás la grassa e untarás la carne caliente e dárgelo as a comer, e bañarlo as con aquel agua en que fue cocha la culuebra. E cuez los atramuzes, e cozerlos as en aquel agua e bañarlo as .ix. días al sol caliente, e assí será sano.
XVI
Quando el açor á mal en la moliella e non gelo pudieren coñoçer, toma una raíz de que quiere e fiéndela en medio, e los cabos sean ayuntados; e pon el açor en medio e déxal’ un poco, e ponli un poco de sal quanto tomarás con los dedos e ponle çerca del fuego e dal’ a comer de los gargueros, e será sano.
XVII
El açor que non puede mudar. Toma una culuebra viva e bátela bien e cuezla con el trigo mucho en el agua, e da el trigo a comer a una gallina por .ix. días, e después darl’ as la gallina a comer. E si por esto non quissiere mudar, toma los peçes menudos del río e fazlos polvos e échagelos sobre la carne, e mudará luego.
XVIII
Quando el açor es maltrecho del sol. Toma el agua rossada e échagela en las narizes, e dal’ la carne de la cabra con la miel, e ruçíal’ la cara con el buen vino, e sanará.
XIX
Si l’ quissieres fazer bien manso al açor e que prenda bien aves. Teinle de noche e de día en mano e no lo lieves al sol ni al viento, ca grave mal le faze. E quando quissieres en otro día ir a caçar, dal’ en la noche a comer un poco de carne de buey, e dal’ de la carne de la lengua con el vinagre un poco, e ve caçar a osadas.
XX
Sabet que el açor natural desde ‘l mes d’ agosto fasta ‘l mes de novienbre es de curiar que non se[a] muy magro ni muy gruesso. Et por el mes de novienbre sea bien gruesso.
XXII
Pora ‘l açor que á podagra. Toma la lechetrezna con la miel e con el vinagre e un poco de cal, e buélvelo en uno e átalo allí ó oviere la podagre. E después que s’ moviere el mal, úntalo con el áloe.
XXIII
Si açor oviere tiña, úntalo con el vinagre allí do fuere la tiña e con la fiel del buey, e dal’ la carne con las sedas picadas del puerco, e sanará.
XXIV
Quando el açor es muy gruesso, átal’ alguna cossa un poco pessada sobre las renes, e faz un foyo peq[ue]ño e toma un poco de piedra sufre, poco mas d’ un grano de trigo, e sea tanto quanto la piedra sea quemada, e será sano.
XXV
Si el açor oviere fumo en los ojos e los abriere e los çerrare a menudo. Toma el buen vino e la miel rosada e póngelo en las narizes cada noche, e échal’ del vino sobre la cabeça, e será sano.
XXVI
Si el açor non retoviere la carne. Toma el pollo y el musgo e échalo sobre la carne, e la carne sea un poco mojada, e ponle del musgo en las narizes, e sanará.
XXVII
Si non pudiere el açor engrossar. Déxal’ seer algunos días e dal’ a comer lomos de puerco o ánsares o gallinas gruessas. E del’ a comer sienpre un omne; e el que l’ troxiere que ande egual mientre, e assí engrossará.
XXVIII
Quando el açor á mal en la boca. Toma las nuezes mondadas e la ressina del enebro e atarlas en un paño, e déxalo tanto ý estar fasta que sea quemado; e después fazlo polvos e buélvelos con la miel e con la manteca; e dárgelo as a comer. E échal’ de los polvos en la boca, e sanará.
XXIX
Quando caen las péñolas al açor. Fázele polvos de la çelidonia, e toma un poco de sal e de vinagre fuerte e ponlo tres días allí dont las péñolas caen, e sanará; e dal’ a comer carne caliente con la limadura del azero e de oro, e sanará.
XXX
Quando el açor treme. Toma el coraçón de la gulpeja e el sevo del gato e las raízes del rávano, e cuezlo en vino con del agua, e coje la grassa e úntal’ el paladar; e toma el arena caliente e quémal’ d’amas partes, en la faz e la fruente, e será sano.
XXXI
Si el açor oviere piedra. Toma el yedgo e la yedra e la manteca, e cuézlo en vino e faz píllolas e dágelas a comer, e sanará.
XXXII
Si doliere la cabeça al açor. Toma el tan e métegelo en las narizes, e sanará. E toma los granos del saúco e májalos, e lave el açor con el çumo, e sanará.
XXXIII
Quando el açor oviere mal en la cabeça. Toma los claveles e la cannela e el gingibre e los cominos e la pimienta e el áloen e la sal ruvia e el díadragante, tanto de lo uno como de lo ál, e muélelo e mézclalo todo en uno e ponlo en una teja e caliéntalo al fuego; e por un cañudo echa la meatad de los polvos bueltos con el lardo del puerco, que sea bien blanco, e que sea tanto como una avellana; e si non ovieres lardo, toma la manteca e póngelo en el paladar; e después fazle estar al sol fasta que camie lo que toviere. Et otro día dal’ a comer lardo quanto una nuez, e al terçer día dal’ a comer un palomino ruvio, e al quarto día fazle bañar, e assí sanará.
XXXIV
Quando el açor torna. Toma el golondrino e sácal’ la moliella, e toma el pellejo que tiene en la moliella e ponlo al cuello del açor e non camiará, e sanará.
XXXV
Si quissieres que vuele bien el açor. Tómale en la mano e liéval’ ribera del agua, e teínle allá una grande pieça. E quando vinieres ponle en la vara, e toma la carne de la vaca e tájala en un paño e esprímela bien, que salga el vinagre, e tájala bien menuda e dágela a comer; e al segundo día dal’ a comer una pierna de gallina, e a la tarde dal’ a comer un pie de porçiello pequeño, e otro día volará quanto quissieres. E esto es cossa provada.
XXXVI
Quando el açor non puede comer. Toma las limaduras del fierro e las sedas del puerco, e tájalas muy menudas e buélvelas con la limadura egual mientre, e dágelo a comer enbuelto con la carne.
XXXVII
Si el açor roncare por las narizes. Toma los pelos del lobo çerval tajados muy menudos e dalos con su çevo a comer, e sanará.
XXXVIII
Si el açor trieme. Toma una mosca viva de los perros e dágela a comer con so çevo, e sanará.
XXXIX
Quando quissieres mudar el açor. Toma los samarucos e cuélgalos por los ojos fasta que se sequen, e fazlos polvos e dágelos a comer con so çevo e mudará bien, esto es provado. O tomarás un gato, e métel’ en una olla nueva e sin agua e dal’ fuego fasta que sea quemado, e fazlo polvos e dal’ d’ellos a comer con su cevo e mudará muy bien.
XL
Si quissieres que los pellos que arrancaren que nunca nazcan. Toma el erizo e dessuellal’ e mete la carne a cozer con olio de olivas; e toma los huevos de las formigas e destiénpralos con el olio, e no lo fagas quando el olio fierve mas quando fuere tibio; e si quissieres, toma un poco de apio e buélvelo con ello e unta quando quissieres.
XLI
Quando el açor á mal en la cabeça. Toma tres granos de fabarraz e tres de pimienta e tres de claves de girofré, e muélelo todo en uno en un mortero de cobre, e échal’ d’ello en las narizes tres vezes e será sano. O toma quanto pesso de dos dineros de arambra e .i. de gingibre e muélelo cada uno por sí; e toma la manteca sin sal e fazlo bollir, e echa el ambra primera mientre e después del gingibre e después la manteca e de sí la pimienta, e después faz d’ello pelliellas; e quando gelas quissieres dar tein-le çerca del fuego o al sol fassta que sea bien escalentado, e dal’ una peliella e no l’ des a comer fasta ora de nona, e después dal’ a comer fígado de porçiello, mas no l’ fartes d’él.
José Manuel Fradejas Rueda
Creación / última revisión: 08.06.2012