Textos clásicos


Evangelista

Libro de cetrería

Manuscrito, Viene, ÖNB, Palatino 5941

Libro de çetreria que hiço Ebangelista. Trata de las abes de rrapiña, de los talles y plumajes y propiedades de cada vna dellas, y de los gouiernos y curas para sanalles las dolençias.

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Capitulo primero que habla de los girifaltes

Halcon girifalte se diçe por alcon que jura falso y asi lo son. Causalo que se engendran dentro del guebo y naçen en el nido, y ansi se crian asta que buelan. Tu, caçador, que los as de comprar, mira que sean de talle de lanterna y que tengan el plumaje de su color, de la madre; y que tenga cabeça con su pico y la lengua al cabo del pescueço, porque si la tiene en medio pareçeria que tiene dos papos y cabeça ninguna. [fol. 148v] Y sobre todo mira que sea abiuado porque todos los muertos aprueuan mal en nuestra Castilla, y salen floxos y desmayan y pierden el comer asta que se secan, y por eso son abes de muy buenas condiçiones, que mejor los contentaras con un papo de galina que con quatro honças de baca. Salen algunos dellos muy buenos golondrinos, y como la golondrina no sea de muy grandes fuerças si se pusiere en defensa y hiriere al tu falcon en lugar peligroso, toma la dicha golondrina y pelala y machacala y ponsela en la llaga y si no sanare, no se te de nada.

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Capitulo segundo que habla de los sacres

Falcon sacre fue llamado ansi porque el primero que caço con ellos fue un sacristan. Si ubieredes de comprar alguno, mirad que sea muy apañado, de hechura de ysopo. Que tenga el prumaje qual mas te agrada. Y que tenga dos pies, y en cada pie quatro dedos, y en cada [fol. 149r] dedo vna vña, y si no lo supieres bien contar por el quento de la luna, lo sacaras en el año que no tubiere vissesto. Y este falcon tiene esta propiedad: que siempre esta em pie durmiendo y vellando, y como sea abe pesada y carge todo sobre los pies, salen los mas gotosos. Aslos de guardar de las çiberbedas, espeçialmente de galinas prietas, y tanto se atrebe[n] a ellas que a las beçes se alla mal dello. Y si por caso la gallina te hiriere tu alcon, pelala y guarda bien la pluma para el espotal, porque si mucho te dieres a la caza no sabes en que pararas, y enviame la gallina a mi posada, que por el gusto della sacare la rreçeta para tu falcon.

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Capitulo terçero que habla de los bornies

Borni es nombre griego que quiere deçir probechoso, y ansi lo son. Y pareçen un poco en el plumaje a los sacres, pero alguna diferençia ay porque el borni desde el pico asta las rodillas esta lleno de [fol. 149v] pluma y el pelo tira a buriel y es mudado a par dellos. Tiene artas propiedades buenas: Lo primero que muda vna bez en el año y de quantas mudas mudare, tiene su dueño vn año mas y el falcon otro. Y en la casa donde no ay mas de vno es ymposible allar dos aunque se trastorne toda de arriua avaxo. Y estos alcones son de carne porque si fueran de pescado, en sacandolos del agua luego se murieran y por esto hauiaseles de haçer el alcandora devajo del agua, y en lugar de cascabeles auiansele de poner calauaças, que de otra manera aogarse yan porque no saben nadar. Salen algunos dellos muy buenos perdigueros, en espeçial vnos que son de talle de guitarra teniendolos muy bien templados, y saliendo con ellos a caça vn dia que no sea açiago no sera marauilla que con el y con una rred tiraderra maten de cada buelo vna banda de perdiçes, si ellas quisieren entrar en la rred. [fol. 150r]

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Capitulo quarto que habla de los alfaneques

Alfaneque quiere deçir en arauigo afanador. Estos falcones vienen de allende y son de talle y pluma y condiçion y tamaño ni mas ni menos que Dios los hiço. Tienen dos cosas en que los conoçeras entre los otros: la primera que tiene el pico rretornado; la otra que tiene el colodrillo en derecho de la cola. Son alcones de muy buena haçija, y aun tienen otra cosa muy buena: ni tosen ni escupen, y esto preçian mucho los alconeros, porque no ay cosa mas aboreçible a ellos que el alcon tosedor. Pero tienen vn mal, que comen carne en viernes y en quaresma, que todo lo haçen ygual a la morisca. Tienen otras cosas muy buenas, que si lo tienen bien tenplado tan bien bolara en martes como en lunes, mas a los de lleuar cabalgando porque son malos peones. Tienen las plumas [fol. 150v] tan delgadas que todas se rroçan. Quando salieres a caça con el, mira que llebe ambas sus alas, porque mas buelan con dos que con vna. Salen destos muy buenos lebreros, pero quieren que llebes muy buen galgo o ballesta, y ansi tube yo vno, que nunca mate yo liebre, con el galgo y la vallesta, que se le fuese a el.

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Capitulo v. que habla de los tagarotes

¿Quieres saber por que se llaman tagarotes? Preguntaselo, que a mi no me lo an querido deçir. Estos son vnos alcones ochabados como guebos. E quieren pareçer a los vaharies pero en la cabeça o cola los conoçeras porque la cabeça toda es de prieto y la cola le sale del ouispillo. Y la causa por que tienen la cabeça prieta es porque el primero que caço con ellos hera un escriuano, y como sean falcones muy aprobechados, tanto [fol. 151r] se dio a ello que vino en grande neçesidad y no tenia para comprarles capirotes de manera que los traya con el tintero puesto en la cabeça, y si alguno le demandaua algun testimonio no se lo osaba quitar porque el falcon no se abatiese, y desto enprobeçio, y con la tinta quedo el alcon prieta la cabeça y dende entonçes salieron todos cabeçiprietos. Tienen una propriedad: que siempre duermen la cabeça debajo del ala, y quierote deçir que quanto hacen de dia belando tanto haçen de noche durmiendo. Este escriuano tubo tres falcones, que es una muda entera, y como estaban en la vara por pasatiempo jugaban al abejon y pensaban entre si que tambien jugarian de noche, entre sueños, y por eso determinaron de poner la cabeça devajo del ala. Son falcones malenconiosos, por qualquiera cosa se hinchan, por eso, quando alguno comprares, mira que tenga [fol. 151v] dos espiradores devajo de la cola porque si se yncharen no rrebienten. E aunque por la mayor parte son de poco prouecho, pero mandilandolos mucho y saliendo a caça con dos o tres juntos, no sera mucho que maten una cassa de hambre, aunque aya en ella veinte personas.

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Capitulo vi. de los vaharies

Baharies es nombre bizcayno y quiere deçir variel. Y nunca vino nombre tan propio porque ansi pareçen variel como el puerco vallesta. Y estos falcones vienen de Bizcaya y segun duran poco con sus amos, presumese que vienen aprender la lengua castellana como los mochachos y luego se ban apañando lo que pueden a sus amos, que ansi hiço a mi otro, que a cabo de un mes me llebo vnas piguelas nuebas y unos cascabeles y un capirote en la cabeça porque hacia frio. Estos tales falcones son de plumaje de sus antesezores; son m[uy] ligeros, [fol. 152r] que dexan de correr y buelan y pareçe que no ponen los pies en el suelo, tanto que serian buenos para llebar cartas si bolbieçen con la rrespuesta, mas cada dia buscan amo nuebo porque no quieren que les hagan mas que la costa, que lo otro ellos se lo buscan. Estos falcones nunca mean, y por esto son emfermos de la hijada y crian piedra, y ansi an de caçar con ellos a pedradas, porque vna piedra saque otra. Y abeys de ir ençima de vn buen caballo, y a beçez el ençima de vos, quanto mas si le ponen las espuelas por buen atolladero. Estos matan asaz rralea, pero mas matan caballos de caçadores y aun al caçador. Que hartas beçes habre andado por los montes dando boçes diçiendo: ¿Bistes por alla mi halcon?.

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Capitulo vij que habla de los meliones

Meliones quiere deçir mill hombres, y tamaño es el como todos ellos. Estas son habes muy cortas [fol. 152v] de rraçones y muy largas de ancas y cuello y cola, tanto que puesto en la mano pueden llegar çerca del ojo, pero por quitar yncombinientes les deben de dar un nudo al pescueço. Son habes muy trabajosas de haçer, pero despues de hechas no queriades ser naçidos. Sallen dellos muy buenos, espeçial vnos que son de talle de albarda y su plumaje de color de no se que. Quieres saber que matan muy buenos mosquitos y carne muerta. Es su comer de contino el atauio de la jineta, caparaçones, albornoçes y borçeguis, y aun al borciguinero con sus hormas se lo lleban por pluma si no se pone a rrecaudo. Y si te preguntaren para que es, di que para meter en el salbonor a los preguntadores. Diçen que jalbegaran en una noche toda una casa.

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Capitulo viij de los nobles

Falcones nobles son ansi llamados porque son [fol. 153r] de color de niebla. Son habes muy preçiadas de principes y grandes señores. Estos caçan en altaneria entre el çielo y la tierra, espeçial los que son de talle de bexiga llena de viento, que ansi es la vexiga de las cosas mas liuianas que ay en el mundo. Y tienen los ojos devaxo de las çejas y el casco par de las nariçes. Son muy denodados. Y as de caçar con ellos en esta manera: antes que le heches de la mano, sacale el menudillo todo del cuerpo por que este muy ligero. Y ali en do otras muchas rraleas que matan, tienen grande omeçillo con los labancos y garças, y la causa por que, es esta: tu sabras, que estos falcones se solian çebar en paloma y un dia andando a buscar de comer, fue a tomar el agua a una laguna que estaba llena de labancos y garças, y como los labancos son las habes del mundo mas luxuriosas, ansi como lo vieron muy bien mojado antes [fol. 153v] que se enjugase çeraron con el y desbirgaronle y dexaronle por muerto. Las garças que vieron esto dixeron: Pues ¿como lo comeremos?. Dixeron las otras: Asado. Dixeron: Pues ¿que es del asador?. Dixo la mas atreuida dellas: ¿En que estays? ¿Para que me dio Dios a mi este pico sino para que me aprobechase del?. Y pasolo de parte a parte con el pico, y por burlar a las otras empeço a uyr con el, y topose con un compañero del muerto, que ya sauia el negoçio como havia pasado de un cueruo que se lo hauia dicho, el cual se fue a la garça y le dio tantos golpes asta que la mato y de alli quedo el enemistad ya dicha; y ansi, por esta causa, los neblies a las garças traen del çielo y a los labancos sacan del agua. Son abes que no ay hombre en el mundo que sepa donde ellos crian, mas los que algo saben, siempre presumen que sera entre el çielo y la tierra, porque si no naçiesen [fol. 154r] no baldrian vn marabedi, que nunca bistes los que estan por nacer quantos son.

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Capitulo viiij. de los açores

Açores son vnas abes muy hermosas si las ay en las abes, aunque en Castilla son muy malos y peruersos, en espeçial los de Galiçia que son muy peligrosos. Aslos de guardar bien de nabos y castañas que son viandas bentosas. Son buenos piadores, que mejor pian todas las horas del dia que los gallos cantan las de la noche. Si los sacays a caçar, en lugar de haçer su hecho, paranse a tirar dardillos presumiendo de braçeros. Abeysles de dar la pluma en saliendo al campo porque caçen con ella, porque mientras mas pluma tubieren mas bolaran. Y de tenellos artos y de malos caçadores se açen araganes, tanto que diçen algunos que es muy bueno [fol. 154v] dalles el papo y aun dexallos toda la noche en el campo y a la mañana yr por ellos; y a mi ber mejor seria nunca bolber. Otros diçen que es mejor juntallos para la muda, y con los perdigones tornallos haçer de nuebo, mas porque tu açor mude temprano, antes que los perdigones sean grandes, debesle buscar vna muda muy abrigada donde no entre mosca ni gallego, y este a de ser vn horno, y busca paja de çenteno y sarmientos de çepas prietas en que se entregue, y metelo dentro del horno y ponle vianda para un mes, y çierra la puerta del horno y sueltalo dentro y por que no este a escuras ençiende la paja, y a cabo de un mes sacale y hallarle as tan mudado, ansi de pelo como de condiçiones, que casi no le conosçieras, y nunca jamas criara piojo ni aradores. Tambien ay algunos açores que no quieren tomar el agua, y estos tales no pueden haçer cosa buena, pero para que [fol. 155r] la tomen, bus[c]a vn rremanso que te de hasta las cinchas y un canto que pese asta diez libras y ataselo al pescueço con dos palmos de cordel de lino, y ata vn poco de carne al canto y el falcon, por cubdiçia de la carne, yra tras el canto y ansi tomara el agua, pero guarda que no lo ates al pescueço la nomina del dean de Cordoua porque si lo haçes podria ser que te bieses en algun peligro. Y algunos açores ay que crian agua en la cabeça, pero ponles tu vn majuelo y criaran vino.

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Capitulo x. que habla de los gabilanes

Los gauilanes son unas habes mas hermosas que ninguna abe de rrapiña y muy ligeros, tanto que en otros rreynos las damas caçan con ellos. Son muy denodados y, aunque son pequeños, no ay cosa, por grande que sea, que no acometa[n], y a [fol. 155v] quantos matan a tantos quitan la bida. Son abes muy frias de ymbierno, pero a tu gauilan debesle frisar porque este caliente y dalle a comer cosas calientes, y estas no pueden ser mejores que guebos papos de brasa; y en berano son los mas calerosos del mundo, y por esto los as de traer tundidos y ansele de dar papos frios, ansi como de nieue, que es muy fria cosa, y con esto ternas tu falcon muy bien sano. Y asle de dar a rroer cada mañana cosas que no tengan gueso porque, ¡mal pecado!, no tienen dientes, pero un rraçimo de vbas es muy buena cosa. Son muy malos de pasar en ynbierno, no siento como los pases mejor que en çeniça porque ansi bien se guardaran asta la muda. Aslos de llamar a la mano cada noche a maytines, y no los llames al pie porque no tomen algun rresabio, que bien lo saben haçer. Y desque sea bien mareñero, [fol. 156r] metelo en muda tremprano, y ten manera de tener agua de mayo y ynche vna olla nueba, y mira que sea de varro de Ocaña, y ponla a herbir en leña de taray y desque yerua a borbollones, tomalo por las piguelas y metelo dentro, y despues sacalo y pasa la mano por el y veras quan mudado queda tu gabilan. Y para que sepas los buenos de otros como an de ser y de que talle y plumaje, preguntalo a los labradores y deçirte an que asados y varrados con ajos y azeyte.

Olbidoseme de deçir, quando dixe de los açores, como ay algunos torçuelos que salen buenos salbo que salen algo rreboltosos, y se haçen pedaços con las manos por estar en alcandora, y son malos capiroteros. Estos tales, porque se quiebran las plumas, buelbelos del rrebes y traerlos as bien guardados.

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Capitulo xi de los esmerejones

Esmerejones son unas abes muy pequeñas, de plumaje de alcones. Muy cortos de pretina tanto como de cuerpo. Destos ay pocos y menos se curan los caçadores dellos, causalo que ay pocos porque presumen de haçer tanto de sus personas que duran muy poco en esta manera, que ellos son grandes caracoleros y andan siempre dos juntos, y ponen tanto la fuerça en descargar sobre el caracol haçiendo suertes al çielo y vaxando a los abismos que, como los caracoles tengan los cuernos muy feroçes, como sabes, al descargar con el desatino que traen, lançanse a las beçes el vno por el vn cuerno, el otro por el otro, y ansi acaban los mas, y los [que] quedan no tienen ley con su dueño, que luego saben. El rremedio para que no se te bayan, es que te vayas tu tras el antes que el de ti y ansi no te quexaras que se te fue. [fol. 157r]

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Capitulo xij de los milanos

Milanos quieren pareçer habes de rrapiña, y ansi lo son de cosas muertas porque diçen que nunca Dios quiera que ellos saquen alma donde no la pusieron. Son habes de grandes cuerpos y bien plumadas, salbo que son floxos. Y son muy piadosos y tienen el mal que sabes. Son a beçes de gran conçiençia, nunca les beras poner las manos en cosa viba salbo en el pollo, y esto haçen porque an piedad de las madres que los crian, y presumen de criar tantos juntos que no los puede[n] cubrir bien con las alas y salense devajo y andan muertos de frio, por esto bereis los milanos deçender a donde los oyen piar y rrecogenlos vno a vno, y ansi, piando, se los meten [en] el papo a calentar y pian aun dentro del papo, y por eso se dixo: Tarde piache. Estos milanos son habes muy frias, y si as de caçar con ellos con-[fol. 157v]-viene que los metas tres dias antes a calentar en el seno, y despruebale al agua; y pelale todo porque con la mucha pluma no haga biento y se rresfrie. Y quando binieres de cazar con el, alcandora que le as de haçer es que le cuelgues cabeça abaxo en una higuera, y guardara los hijos de los tordos.

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Capitulo xiij de los çernicalos

çernicalos se llaman porque vnos frayles tenian teniendo gran prisa en la paneteria, andando buscando ayuda toparon con un abe destas y rrogaronle que les ayudase, y dieronle cargo que çirniese, e desque ubieron çernido cago al frayle, y el frayle tomando piedras para matalle fuese huyendo al campanario y a esta causa siempre beras que ellos hauitan en lo mas alto que ellos hallan. Es vn abe qual Dios apiade. Color de buñuelo. [fol. 158r] No son abes para gastar tiempo con ellas. Con todo creo que matan mariposas y langostas. Son habes mas frias que este libro. Si tu me crees, no las llames a la mano ni a señuelo sino con vn arco quando estan çerniendo el ayre y bernan mas ayna al suelo. Su bianda es nuegados como muchachos.

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Capitulo xiiij. que habla de los alcotanes

Los alcotones, segun se bisten, me pareçen de la horden de Santo Domingo; andan bestidos de prietos con sus botones prietos y al cuello sus capillas blancas que les sale devaxo de las ropas. Siempre andan de dos en dos, como frayles, caçan las deesas y las viñas y los panes, que nadie les diçen: ¡mal haçen!. Siguenlas otras mill frayleçillos porque piensan que son rreligiosos. Y pues son frayles y es bueno el çelo que lleban, no quiero deçir mal dellos. [fol. 158v]

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Capitulo xv. que habla de las aguilas

Las aguilas son las aues que mas alto buelan y son señoras de todas las abes, y no ay cosa, por grande que sea, que, quando estan hambrientas, no acometan, fasta tanto que sacan los ojos a su amo. Son aues de gran bista, tanto que penetran los çielos y beyen, mirando arriba, muy bien los angeles pasearse por el parayso con sus alas, y pensando que son aues, quieren subir a cebarse, y andan ocho dias por el ayre pensando llegar alla fasta que se quieren morir de hambre, y de cansadas dexanse caer avaxo. Y ¡guay del aue tras que andan!, por eso, si alguna bez se ofreçiere que le cayga tu falcon en suerte, diras el rresponso de: A te lebabit oculos meus y ansi sera tu falcon libre.

Agora que te e dicho de las aves de rrapiña y condiçiones, quedame de deçir como [fol. 159r] no ay ninguna dellas mala sino por falta del caçador, por no aber conoçimiento como an de caçar con ellos. Por ende nota bien algunos avisos.

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Auisos para caçar

Quiero deçir que quando el falcon hechandolo de la mano diere alguna arremetida que son arones. Los alcones que esto haçen y que hecharen dardillos y en la berdad no saben lo que se diçen, que sauiendo que ay condiçiones de habes como de hombres, y que vnos son para campos y otros para poblado. Los açores que tubieren esta tacha seran para poblado y as de caçar con ellos ansi: primeramente as de biuir en lugar de mucha caça, y de madrugada cabalgaras en unos alcorques y no en bestias porque el alcon no se espante, y tomaras en la mano yzquierda tu alcon y en la derecha algunos rreales en [fol. 159v] lugar de podencos, y arremeter a la tienda donde benden las perdiçes y ende da los rreales, y andando en pocos dellos beras como se enrredan. Y no buelbas desta manera sin perdiçes con halçon.

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De las purgas

Las purgas son muy peligrosas, y por estas cosas no debes purgar tu alcon muchas vezes, pero purgale vna bez para siempre y esta sera quando te murieres, que lo llebes contigo al purgatorio y alli le puedes dar a comer peccados beniales y no mortales, que luego se te moriria, y saldra para el dia del Juyçio y entonçes podras caçar con el mientras nuestro Señor entiende en juzgar las animas. Para que tu alcon no sea desconoçido, toma la caza que caçares con el y cometela sin dalle a el cosa saluo la pluma, y ansi te conoçera muy bien por el mas rruin del mundo. [fol. 160r]

Para que tu falcon buela el pico al viento, haz que vuelua el pico con vna votiga de biento.

Si tu alcon estuuiere ferido o emfermo, ya saues como nuestro Señor Dios vso virtudes en las yeruas, piedras y palabras. Por ende, quando estuuiere malo, tomaras muchas yeruas y muchas palabras y muchas piedras, que no faltaron palabreros de quien las aya de valde, y muelelo todo junto y hazle vn emplasto y ponlo ençima de la llaga, y luego sera sano. Y asle de guardar del viento, no te acontezca lo que disen: Que palabras y plumas el viento las lleua.

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José Manuel Fradejas Rueda

Creación / última revisión: 05.06.2013